Prefieren suelos arenosos, livianos y de rápido drenaje. Generalmente se las encuentra en grupos de numerosos individuos de flores del mismo color, asociadas a otras coloridas especies/variedades, las cuales, en su conjunto, forman una atractiva vista.
La verbena fue muy celebrada en la antigüedad y figuraba en la mayor parte de las prácticas religiosas. Los celtas la asociaban al muérdago y de ella se servían los druidas para predecir el futuro.
Los romanos la empleaban para hacer las aspersiones de agua lustral y purificar los altares al ir a hacer los sacrificios.
En la guerra, los heraldos enviados al enemigo llevaban en señal de paz una rama de verbena.
Los recién casados creían asegurar su felicidad yendo al altar con un ramo de esta planta oculto debajo de su manto. A fin de disipar o prevenir las enfermedades, conjurar los hechizos y librarse de los genios maléficos, colgaban los antiguos matas de verbena en sus camas y en las puertas de las casas.